En un esperado regreso al MGM Grand Garden Arena, el lugar de su debut en Estados Unidos 24 años antes, Manny Pacquiao, a sus 46 años, aspiraba a grabar su nombre en la historia como el campeón de peso wélter más longevo. Sin embargo, su intento contra el campeón del CMB, Mario Barrios, la noche del sábado, concluyó en un empate mayoritario, dejando a Pacquiao sin el título.
“Creí que había ganado la pelea”, declaró un decepcionado Pacquiao. “Fue una pelea cerrada. Él fue muy duro”.
Pacquiao lideraba en las tres tarjetas de puntuación al inicio del décimo asalto, pero Barrios se adjudicó los últimos tres asaltos de todos los jueces, asegurando el empate y reteniendo su campeonato. La decisión, 114-114 en dos tarjetas y 115-113 a favor de Barrios en la tercera, fue recibida con una respuesta apagada por parte de la multitud de 13,107 personas, predominantemente pro-Pacquiao.

Poniendo fin a un retiro de cuatro años y recién salido de su inducción al Salón Internacional de la Fama del Boxeo, Pacquiao (62-8-3, 39 KOs) comenzó fuerte contra Barrios, 16 años menor. Al principio, emergió un Pacquiao clásico, en marcado contraste con el boxeador lento visto en su derrota de 2021 ante Yordenis Ugas. El único campeón mundial de ocho divisiones del boxeo encendió la arena con su ofensiva característica, conectando golpes de izquierda y combinaciones a través de la guardia de Barrios.
Sin embargo, el “Padre Tiempo” pareció alcanzar a Pacquiao, ya que el exsenador filipino disminuyó notablemente la velocidad en los asaltos intermedios.

“Necesito continuar mi entrenamiento por más tiempo para una pelea de campeonato”, explicó Pacquiao, quien anunció su regreso en mayo después de una fallida campaña senatorial. “Debido a las elecciones, comencé tarde, pero está bien. Por supuesto, me gustaría una revancha. Quiero dejar un legado y enorgullecer al pueblo filipino”.
Barrios (29-2-2, 18 KOs) llegó al combate con solo dos derrotas, ante Gervonta Davis y Keith Thurman, aunque sus recientes actuaciones contra Abel Ramos (empate) y Fabián Maidana (victoria) habían sido menos que estelares. Pacquiao eligió a Barrios para su regreso, asegurando una oportunidad por el título bajo las reglas del CMB que permiten a los excampeones desafiar después del retiro. A pesar del casi éxito de Pacquiao, Barrios montó una fuerte remontada.
“Su resistencia es increíble”, comentó Barrios. “Sigue siendo increíblemente fuerte y su timing es real. Sigue siendo un boxeador muy incómodo de intentar descifrar”.
Mientras Pacquiao reunía energía para las combinaciones, la fatiga era evidente en la segunda mitad, lo que permitió a Barrios hacer lo suficiente para influir en los jueces. Pacquiao conectó 101 de 577 golpes (17.5%) en comparación con los 120 de 658 (18.2%) de Barrios, aunque Pacquiao tuvo una ventaja de 81-75 en golpes de poder.
Barrios expresó interés en una revancha con la leyenda. “Haré la revancha”, afirmó Barrios. “Absolutamente. Esto fue enorme para el boxeo. Me encantaría hacerlo de nuevo”.
Dado el deseo declarado de Pacquiao de volver a pelear, otra oportunidad de hacer historia podría estar en el horizonte. Hasta entonces, puede encontrar consuelo en haber demostrado su perdurable habilidad.
“Espero que esto sea una inspiración para los boxeadores de que si tienes disciplina y trabajas duro, aún puedes pelear a esta edad”, concluyó Pacquiao.