En un partido salvaje y lleno de acción, Minnesota United cayó 4-2 ante San Diego FC esta noche, recién salido de su descanso de una semana. A pesar de la derrota de los Loons, el partido fue un espectáculo cautivador de principio a fin, con un gol en propia puerta y un disparo desde el círculo central.
Se realizaron ajustes significativos en la alineación inicial 5-4-1. Wessel Speel reemplazó a Dayne St. Clair en la portería, mientras que Kelvin Yeboah lideró el ataque. Owen Gene una vez más se asoció con Wil Trapp en el mediocampo, y Anthony Markanich ocupó el lugar de Joseph Rosales en el flanco izquierdo. Robin Lod, de regreso del servicio internacional, comenzó en el banquillo, lo que permitió a Bongokuhle Hlongwane ocupar su puesto habitual y jugar junto a Julian Gressel.
La puntuación comenzó solo ocho minutos después con un gol en propia puerta de San Diego, poniendo a los Loons por delante temprano. Sin embargo, su ventaja duró poco, ya que el golazo desde el mediocampo de Anders Dreyer igualó el marcador dos minutos después.
La primera mitad mantuvo su ritmo frenético, mostrando los estilos distintos de ambos equipos y generando más emoción de lo esperado. El hábil juego de Dreyer continuó desafiando la defensa de los Loons, mientras que las carreras hacia adelante de Kelvin Yeboah estiraron a la oposición. Los esfuerzos de Yeboah dieron sus frutos en el minuto 38 cuando aprovechó un rebote descuidado de Dos Santos, terminando un contraataque clínico con la precisión de un verdadero delantero.
Después del descanso, los Loons lucharon por mantener la posesión, lo que permitió a San Diego afirmar cada vez más el control. Una revisión del VAR en el minuto 66 resultó en un penalti para los visitantes, que Dreyer apenas logró colar por encima de Speel para igualar por segunda vez. El sustituto Milan Iloski luego puso a San Diego por delante en el minuto 75 con una jugada inteligente, asegurando un doblete con otro gol en el tiempo de descuento.
Aunque el resultado fue decepcionante, el debut en la MLS del graduado de la Academia Darius Randell brindó un momento de alegría para el club. Aunque sus habilidades solo se vieron en breves destellos mientras los Loons presionaban para lograr un empate, fue alentador presenciar al joven jugador a la altura de las circunstancias en un partido de tan alto riesgo.
Finalmente, el buen trabajo de Minnesota United se deshizo por algunos momentos de caos, lo que subraya la importancia de cada segundo en un partido que dura más de 90 minutos. Los Loons ahora tendrán otra semana libre para reagruparse antes de regresar a Allianz Field el miércoles 25 de junio para enfrentar al Houston Dynamo.