LSU ganó su primer título de baloncesto femenino de la NCAA, superando a Iowa con una victoria de 102-85 el domingo, anotando la mayor cantidad de puntos en un juego por el título femenino.

Los Tigres usaron un ataque ofensivo balanceado y tiros exteriores mortalmente precisos para construir una ventaja de 17 puntos en el medio tiempo, luego aguantaron un valiente esfuerzo de regreso de los Hawkeyes para reclamar el título.

Jasmine Carson anotó 22 puntos desde la banca, en solo 22 minutos, y LSU, la tercera cabeza de serie, logró una victoria por 102-85 sobre la querida del torneo Cinderella Caitlin Clark e Iowa para reclamar el campeonato nacional de 2023.

Fue una actuación asombrosa para Carson, en su tercera escuela después de las paradas en Georgia Tech y West Virginia. Las Tigers, que apenas están en el segundo año de la era de Kim Mulkey, también fueron bastante buenos. LSU ganó la batalla de rebotes 36-26, convirtiendo 14 tableros ofensivos en 14 puntos de segunda oportunidad. También acertaron 10 triples (su temporada alta es 11) y lanzaron un 54% desde el campo, liderando durante más de 34 minutos.

Solo dos años después de hacerse cargo de un programa LSU oprimido 9-13, la entrenadora Kim Mulkey llevó a las Tigers a un récord de 34-2 y ganó su cuarto título nacional. Anteriormente llevó a Baylor a campeonatos en 2005, 2012 y 2019.

La jugadora nacional del año Caitlin Clark agrego para Iowa con 30 puntos.

Caitlin Clark, finalizó una increíble carrera en el torneo, quedando justo por debajo del primer campeonato nacional del programa. La joven eligió a los Hawkeyes no solo para estar cerca de su familia en West Des Moines, Iowa, sino también porque realmente creía que podía alcanzar su sueño de llevar a Iowa a su primera Final Four femenina desde 1993.

Ella hizo eso y fue más allá: llegar a la final de la NCAA. En el camino, se convirtió en una leyenda aún más grande, no solo en casa, sino entre los fanáticos del baloncesto en todo el país. El torneo femenino de la NCAA comenzó en 1982 y ha habido actuaciones de superestrellas en cada uno de sus más de 40 años. Pero ciertas actuaciones realmente han captado el interés del público y han puesto a los jugadoras en el centro de atención.

Es difícil no incluir a jugadores icónicos como Rebecca Wolf y Maya Moore de los UConn Huskies, Bridgette Gordon y Candace Parker de los Tennessee Lady Vols, o Charlotte Smith de los North Carolina Tar Heels, entre muchas otros, en esta lista en particular. . Sin duda, están entre los mejores que jamás hayan jugado en el torneo de la NCAA.

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